Se trata de la rehabilitación de la planta baja de unos de los edificios originales de la Calle Marqués de Larios, situado en la esquina de la manzana. Siguiendo el plan director de la Calle, la propuesta trata de recuperar la imagen original del inmueble, desvirtuada por una desafortunada intervención anterior. Con un programa innovador que aglutina en un único espacio usos tan dispares como Oficina Bancaria, zona Co-working y Cafetería, son matizados en el proyecto con un juego de volúmenes que sectorizan los usos, sin perder la lectura global del local.

El proyecto trata de equilibrar la aplicación de la imagen de marca con el mantenimiento de los elementos originales del edificio. La presencia de una amplia fachada con grandes huecos rítmicos que la conforman, enriquece la propuesta con una relación muy acusada entre la calle y el local.